Alarmante escalada de violencia en Chiapas/Situación grave en regiones zapatistas

En Chiapas hay una escalada de violencia. La situación es grave en las regiones indígenas. Como han documentado ampliamente las juntas de buen gobierno zapatistas y varias ONG de la entidad, la actuación de la OPDDIC es agresiva y digna de preocupación: decenas de comunidades amenazadas con la violencia, amago continuo de hombres armados, destrucción de cultivos, despojo de parcelas, secuestros, golpizas a personas indefensas e inocentes, tiroteos, familias y comunidades expulsadas de sus casas y tierras, evidencias de que se entrenan militarmente grupos civiles con la participación del Ejército federal.

A esto se suma el respaldo de las autoridades agrarias a los intentos de arrebatar miles de hectáreas a comunidades que las trabajan legítimamente desde hace más de una década y, hoy, la agresión en Ocosingo al camarógrafo indígena Carlos Vázquez Guzmán y a un observador de derechos humanos, por parte de la OPDDIC.

Este mediodía, un grupo de personas amagó con interceptar el paso de una brigada de observadores internacionales y reporteros (entre quienes me encontraba) en las inmediaciones de Agua Azul, acción que no se concretó pues se concentraron decenas de hombres y mujeres de las comunidades zapatistas circundantes, y el grupo mencionado se retiró.

Hay un ambiente tenso en el que miles de personas están siendo afectadas y podrían suscitarse hechos lamentables en cualquier momento. Deben cesar las acciones y amenazas contra la población indígena en resistencia por parte de un grupo caracterizado como paramilitar y con el respaldo del gobierno federal.

Hermann Bellinghausen